Si yo fuera un pequeño aviador, que se lanza en un paracaídas, sería como una burbuja que se escabulle entre los matorrales de la vida, quizás estaría bajando al nadir o tocando el epicentro de la tierra, pienso, pienso, pienso... he de pensar?...
quizás si fuera un aviador en su paracaídas no fuese necesario pensar.
y que tal, si tan solo me dedico a hacer, ¿lo he pensado?... y a hacer que? volar, escabullirse, saltar, sentir el viento... será todo tan lento como para poder descubrirlo?
si fuera un aviador que se lanza en su paracaídas, sería como una palabra en el vacío y si se cumpliese el sueño de usurpar el lugar de altazor por el mio, que he de pensar...
el amor. ¿será posible? pasar una vida descendiendo para no saber hacia donde te diriges o vas?... es acaso una pregunta lo que te determina como individuo... y de la palabra recien reescrita... no será de vitalidad cierta analizar el duo.
si yo hablase menos quizás, y tan sólo quizás seria menos feliz o es probable que las palabras detengan mi caida. y ante todas las chicas idas, no soy más que el pequeño salamonte que no sabe a donde mirar. Volar o descender, ¿ser un aviador como el sueño experimenta con 2?
si yo fuera quien creo ser, sería contradictorio pensar que estoy cuerdo. Ni soy loco ni nada, solo un texto depurado, acalorado, solicitado... mientras practico el nado sincronizado de las palabras que nunca llegarán al puerto. Hoy quizas no pueda volar, ni descender, quizás solo desee encender una pasión que oculta esta y me mantiene vivo.
o no?
o será todo lo contrario?
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